En los los últimos años, dentro del Mundo River, uno de los temas que siempre estuvo, lo sigue estando, presente es elregreso de los ídolos al club de Núñez. Varios tuvieron la oportunidad, aunque luego continuaron su carrera en otros equipos. Algunos jugaron un puñado de partidos y se retiraron y otros hoy tienen el privilegio de estar jugando en River.
Sin embargo, también existe aquel que no pudo cumplir su deseo de volver a vestir la camiseta del Millonario, el club de sus amores. Hernán Crespo detalló por qué no pudo regresar y apuntó directamente hacia Daniel Pasarrella, por entonces presidente del club.
“Yo terminé mi contrato con el Parma y River estaba jodido. No se sabía si iba a descender o no. Desde el Parma me ofrecen renovar, pero yo no quise en el momento. Quería ver qué pasaba con River. Entonces, viajé a Argentina. Hablé con Matías Almeyda, que aún era jugador, y me dijo que vaya directamente al entrenamiento a charlar con ellos. Passarella no me llamaba y yo pensé: “Si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma“, expresó el ex delantero.
Crespo contó con lujo de detalles cómo fue su breve estadía en Argentina, en la que su único objetivo era concretar su vuelta a River, que estaba pasando por los meses previos al peor momento de su historia, el descenso.
“Fui al entrenamiento. Me encontré con Jota Jota López, Lamela, con todos y nos quedamos hablando ahí. Le pregunté a alguno de los utileros si estaba Passarella y me dijo que no. Un utilero me prestó el teléfono y lo llamé en el momento. Le conté que estaba ahí y que quería hablar con él. Me dijo que lo espere, que ya nos ibamos a juntar porque era un momento complicado para él”, agregó Valdanito en diálogo con diario Olé.
Por esas casualidades de la vida, Crespo se encontró inesperadamente con Pasarella, quien le pidió dinero para un “fideicomiso y para otras cosas”, según relató.
“Yo tenía diez días en Argentina. Me pidió mi número y me dijo que me iba a llamar. Se lo pasé y quedamos en eso. Me fui del entrenamiento al Patio Bullrich a comer ahí con y mirá lo que es la vida: en la mesa de al lado estaba Passarella”.
Me dijo: “Quiero hablar con vos”. Yo, por supuesto, le dije que había vuelto al país para eso. Y ahí llegó la frase. Me dijo: “Escuchame, ¿no tenés 300 lucas? Necesito para el fideicomiso y para otras cosas”.
“Yo lo miré y no lo podía creer. Me quería morir. Quería hablar con él para volver a River y me vino con esto. Le dije: “Mirá, Daniel. Si es para comprar jugadores, te puedo dar alguna mano desde Italia. Arreglar algún encuentro con alguien. Ya está, gracias. Chau”.
“Volví a Italia y le dije al presidente del Parma que no tenía ganas de jugar. Me pidió una mano, que estuviera un tiempo más en el plantel. Firmé por un año y a los seis meses me retiré. Quedó como que yo no quise volver a River, pero eso no es verdad“, culminó Crespo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario